22 de octubre de 2016

¿Puede ser la U.T. P. (Unión Temporal de Progresistas) la solución al bloqueo institucional? (II de II)

En la entrada  anterior estudiamos la  propuesta del Partido Popular ante el resultado electoral del 26-J, reclamando su derecho a gobernar por ser la fuerza más votada. Hoy veremos la que encierra el “Manifiesto de los  450”, el penúltimo de los publicados por la izquierda, impasible ante la creciente indiferencia que suscitan estas misivas.

 Amparados bajo el título del “Mundo de la Cultura y de la Intelectualidad” han pretendido emular aquella “Agrupación al Servicio de la República” de Ortega y Gasset, Marañón y Pérez Ayala,  pero no les ha funcionado. Los actuales “abajo firmantes” no tienen ni la categoría intelectual, ni el poder de influencia ni el prestigio personal y profesional de aquellos. 

En la entrada  “El "comando cultural" y la unidad popular”, comenté el  Manifiesto  “MOVER FICHA POR LA UNIDAD POPULAR” con el que trataban de influir en las elecciones previstas para el siguiente diciembre (20-D), apoyando una “unidad popular” que “desalojara a Rajoy de la Moncloa”. Pocos meses antes habían pretendido lo mismo con otro Manifiesto más, “Merecemos otra comunidad de Madrid”.

  “MOVER FICHA POR LA UNIDAD POPULAR” tenía sus antecedentes  en el que PODEMOS  había publicado  un año antes, previo a las elecciones europeas de 2014 “Mover ficha: convertir la indignación en cambio político”. Estos ideólogos de izquierda parecen tener figuras eidéticas. Cada vez que oyen hablar de elecciones ponen en marcha con otro Manifiesto más.

En la  entrega de “El "comando cultural" y la unión de las fuerzas del cambio” comenté, entonces,  las demandas y proyectos de la pretendida “Unión de las fuerzas del cambio” que no llegó a término al  ser desbaratada semejante operación  por los ciudadanos.

Con los anteriores precedentes, los promotores de lo mismo acaban de publicar el penúltimo  Manifiesto,  “Por un Gobierno de Progreso. Por un acuerdo de PSOE, Unidos Podemos y Ciudadanos”, en cuyo enlace se pueden ver tanto el texto como los nombres de los firmantes, y con este otro enlace se puede leer el texto exclusivamenteel cual será el centro del análisis de hoy.

 Entre “Mover ficha para la unidad popular” y “Por un gobierno de progreso, por un acuerdo PSOE, Unidos Podemos, C's” hay un cambio importante. En el primero no contaban con Ciudadanos, ya que no era parte de la "unidad popular” y además provenía de la “derecha”. Hoy le necesitan para alcanzar el “gobierno del progreso” del futuro, y de repente le engloban en la más "popular progresía", haciendo de la necesidad virtud. Tienen prisa por  “asaltar el cielo en vez de conquistarlo”, antes de que el suflé de su  argumentario  se desinfle y trasciendan sus debilidades y falacias, y al que se le pueden presentar las siguientes observaciones:

- Error aritmético nada inocente: ni con los votos de los independentistas incluidos  (1.600.000)  llega  PSOE-PODEMOS-C´s (13.600.000)  a duplicar los del PP (7.910.000).

- Sumas engañosas: Cada ciudadano vota a favor de un partido, excluyendo a los demás. No consta que ninguno diera su voto a ese trío del progreso. El PSOE cuenta con 5.400.000 votos a favor; los demás son contrarios. El PP es quien más votos a favor tiene y menos en contra. ¿Querrá un votante de C´s apoyar a PODEMOS?

- Acuerdo de despacho: la suma de 188 diputados es arbitraria, puro  mangoneo de burócratas  partidistas,  hurta a los demás su poder de decisión y elección. Curiosamente se olvidan de la composición del Senado.

- Juego de ambigüedades: ansían un “gobierno progresista”, sin especificar sus cualidades y objetivos. El DEL define “progresista” como “Dicho de una persona o de una colectividad: De ideas y actitudes avanzadas”. El regreso a ideologías periclitadas del siglo XIX  no  supone ningún “progreso”.

- Manipulación de datos: cargan en el “debe” del  PP “el incremento de la desigualdad, la pobreza, los recortes y el desempleo” sin demostrar su veracidad. Han perdido la capacidad de análisis y autocrítica. En los asuntos citados, el PSOE de ZP sale malparado contra  el PP de Rajoy. El silencio sobre la herencia progresista  de ZP les resta credibilidad. El número de denuncias y críticas no demostradas está en razón proporcional de la demagogia encierra.

- La creación del empleo: los gobiernos no lo traen, sino los empresarios y emprendedores, y cualquier ciudadano puede serlo.

- Reduccionismo de la corrupción al PP: hay  corruptos de todo signo y pelaje en todo tiempo y partido. Las hemerotecas son testigo. Los dirigentes son  corresponsables cuando no lo atajan. Es hipócrita denunciar corrupción en otro y readmitir corruptos condenados en el propio. Nepotismo y el enchufismo también son corrupción.

- Necesidad de acuerdos transparentes: deben aclarar qué persiguen con “la posibilidad de recibir apoyos de otras fuerzas parlamentarias”. Dada la exclusión del PP, sólo quedan los separatistas, salvo CC. ¿Han contado con C´s para esa unidad de fuerzas?

- Derechos sin calificativos: la Educación y la Sanidad no necesitan añadidos.

- El desgaste de pensar: no se han molestado en analizar las causas del incremento de votos de su nefasto PP y el descenso de los benefactores partidos “progresistas”.

- Olvidos conscientes: en el Manifiesto no aparecen “ni España ni Nación”. En  aquel otro “Manifiesto dirigido a los intelectuales” (Gregorio Marañón, Ramón Pérez de Ayala y Ortega y Gasset, 10-02-1931) se hablaba de España, del Estado español,  de la nación española y de los españoles. ¿Serían progresistas?

- Benevolencia de la progresía: los conservadores deberán agradecer a "los abajo firmantes" que no propugnen un cambio electoral con una segunda vuelta incluida. Sería letal para la derecha, ya que los ciudadanos elegirían al partido o conglomerado progresista como gobernante, evitando los cambalaches y chalaneos postelectorales que buscan los poderosos para su permanencia. Así, "un  gobierno de progreso acordado por PSOE, Unidos Podemos, C's” podría dirigir "este país" una legislatura tras otra, ya que son “casi el doble”,…

 Todo lo anterior esto se vendrá abajo, posiblemente, los próximos días si Rajoy logra de alguna forma su investidura a la presidencia del Gobierno de España. ¿Qué nos tendrán preparado para entonces las llamadas fuerzas del cambio y del progreso?

Como Pénelope, ya tienen la lana vieja y usada para empezar a tejer el siguiente manifiesto, y algo más  que llegue a la calle...

1 comentario:

  1. Entre aquellos intelectuales de la República y estos culturales de ahora no hay color por mucho que se pinten

    ResponderEliminar

Los comentarios con lenguaje inapropiado serán borrados